Las pezoneras en la lactancia: ¿una solución eficaz?

La lactancia materna es un momento único y especial para las madres y los bebés, pero en ocasiones pueden surgir dificultades que requieren la búsqueda de soluciones. Una de las herramientas que se utilizan comúnmente son las pezoneras, dispositivos de silicona o látex que se colocan sobre el pezón y la areola durante la alimentación.

Las pezoneras pueden ser útiles en ciertos casos, pero es importante entender cómo y cuándo utilizarlas adecuadamente.

Pros:

  • Alivio del dolor: Las pezoneras pueden ayudar a reducir el dolor en el pezón, especialmente en casos de grietas o sensibilidad extrema.
  • Solución rápida: Su utilización es rápida y sencilla, te ofrece un cambio/mejora de forma instantánea. Importante en aquellas mamás que están a punto de tirar la toalla con su lactancia.
  • Facilitan el agarre: En situaciones en las que el bebé tiene dificultades para agarrarse al pecho, las pezoneras pueden facilitar el agarre y permitir la alimentación directamente del pecho.
  • Estimulación del pecho: Aunque no tan efectivo como la succión directa, el uso de pezoneras puede estimular la producción de leche y mantener el suministro.

Contras:

  • Dependencia: El uso prolongado de las pezoneras puede generar dependencia en el bebé, dificultando la transición a la lactancia directa sin ellas.
  • Disminución de la producción de leche: Las pezoneras pueden afectar la estimulación adecuada del pecho, lo que en algunos casos, puede llevar a una disminución en la producción de leche a largo plazo.
  • Aumento de la frustración: Tener que depender de su uso a que tu bebé se pueda alimentar, tiende a aumentar la frustración tanto para la madre como para el bebé. Estás fuera de casa y no las llevas, si tienes que levantarte de la cama para lavarlas en plena noche, etc.
  • Interferencia en el vínculo madre-bebé: El uso de pezoneras puede dificultar el contacto piel con piel y la conexión emocional durante la alimentación, ya que hay una barrera física entre la madre y el bebé.

NOTAS IMPORTANTES:

  1. Revisa que la talla de la pezonera sea la adecuada. Y ten en cuenta que cada marca tiene una dureza y grosor diferentes. No todas valen para todo el mundo.
  2. Para colocarla, primero debes girarla como un calcetín. Y gran parte de la areola debe estar dentro de ella.
  3. Nunca hay que recomendar el uso de pezoneras, sin antes valorar la causa inicial del problema.
  4. Es fundamental buscar orientación para su uso adecuado y garantizar que no se conviertan en un obstáculo para una lactancia materna exitosa y a largo plazo.

Recuerda que, como asesora de lactancia puedo venir a tu casa si resides en Tarragona o hacer una asesoría online, para evaluar tu situación individual y brindarte recomendaciones personalizadas. Trabajaremos juntas para identificar y abordar las causas subyacentes del problema, y te proporcionaré técnicas y ejercicios para mejorar el agarre y la succión del bebé.

En conclusión, las pezoneras pueden ser una herramienta útil en ciertas situaciones, pero es esencial utilizarlas con precaución y supervisión. Estoy aquí para ayudarte a tomar decisiones informadas y brindarte el apoyo necesario para disfrutar de una lactancia exitosa y placentera. Contáctame hoy mismo para programar una consulta personalizada y obtener la orientación que necesitas.

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